La pandemia ha cambiado los hábitos de vida saludable de miles de personas. Tanto es así que hay países que ya se posicionan los primeros en consumo de frutas y verduras. Contra lo que se pueda pensar, España se coloca en segundo lugar, con un 41% de consumo de frutas y verduras.
El primer país en consumo de fruta y verdura es Rumanía, con un 43%. Es, además, uno de los países que más importancia le da a la alimentación saludable tras la pandemia.
Un estudio difundido por el consorcio europeo EIT Food revela que casi la mitad de los encuestados (49%) dice que la protección de su salud es más importante como resultado de la pandemia; que un 35% compra más productos locales; y que es “muy probable” que un 87% continúe haciéndolo en el futuro.
Destaca el hecho de que un 46% de los españoles comprueba más las fechas de empaquetado y caducidad (frente al 36% de la media europea), y que un 37% de los encuestados en España considera que es importante la cercanía de establecimientos de alimentación (en comparación al 30% de la media comunitaria).
Además, un 34% de los consumidores perdieron parte o la totalidad de sus ingresos durante la pandemia, lo que hace que la asequibilidad de los alimentos sea una prioridad clave después del confinamiento.
Entre los productos que mayor aumento han registrado se encuentran las frutas, con un 32%, y las verduras y legumbres, con un 27%.